viernes, abril 18, 2008

Verdades a medias

Sigo inventando cosas en mi vida o tal vez mi mente las inventa y las mezcla con la realidad. Ahora creo que soy la peor persona del mundo, los motivos no los sé bien (tal vez no existen) pero nunca pensé que estas cosas pasarían, menos a mí.

A pesar de todo me gusta vivirlas, sé que al final terminaré mal como la gran cantidad de gente que pasa por lo mismo, pero lo peor que me puede pasar es quedarme sola...que más da, siempre lo estuve.

Pero pase lo que pase, y si alguien lee estos escritos, quiero que sepan que amo a mi familia más que nada en el mundo y amo a todas las personas cercanas a mí y que siempre seguiré siendo la misma para ellos.

Y para que este post no parezca testamento aquí les va otra historia más de las que no son del todo reales:



Una noche decidí salir con una amiga a un pub y conocí a un joven amigo de ella. Conversamos como si fuéramos amigos de toda la vida, de vez en cuando me suele courrir eso con algunas personas, cada vez es más de vez en cuando. Me agradó mucho, hacía tiempo que no podía conversar con nadie y volvimos a salir, hasta que noté que buscaba algo más.
Casi siempre soy excéptica a creer que alguien me quiere, así que no creí en sus palabras, además ¿cómo alguien podría enamorarse de mí sin conocerme? y conociéndome las razones serían menores.
Decidí seguirle el juego y creer que estábamos enamorados, así tal vez podía dejar de vivir esa historia que hasta hoy no he podido dejar. Salimos juntos por muchos días, casi dos meses para ser exactos y todo fue muy bonito, pero tuvimos que separarnos por la razón más simple del mundo: Yo duermo demasiado y él sufre de insomnio.