jueves, diciembre 07, 2006

Para mi Principito...con un poco de verguenza


¡Oh pequeño Príncipe!, qué bueno que no conociste la Tierra en su plenitud, te horrorizaría saber que la gente no es responsable de lo que domestica y que intentan ver con los ojos ciegos antes que con el corazón, que entorpecen todo con palabras sin creer que realmente sea fuente de malos entendidos.
Que se aferran a lo que creen ver y no a lo que le diga su corazón. Que juegan con los sentimientos de los demás y buscan el camino material. Que no les importa las puestas de sol, ni cuidar a una rosa que está sola en el mundo.
Qué bueno Principito que llegaste al desierto, dónde no abundan humanos y no tuviste que sufrir viendo a gente tan irrazonable, que quiere a quienes no los quieren y maltratan a los que los cuidan, que nunca están contentos con lo que tienen y siempre quieren más o quieren lo que no tienen.
Qué bueno Principito que hoy estés con tu rosa, tu cordero y tus tres volcanes, que quites los baobabs para cuidar tu mundo y pienses que en la Tierra te enseñaron muchas cosas. La verdad Principito, los sabios fueron los animales. Los humanos te hubiéramos ayudado a destruir tu planeta mi Pequeño Príncipe.